Publicado en www.red-belgrano.com.ar el 25/10/2012
En 1950 General Belgrano fue invitado a participar en un Torneo
Relámpago organizado por Sportsman Carmelense, en el cual intervinieron otros conjuntos de la zona.
Como Belgrano había desarmado su plantel de primera división y no
participaba en el Campeonato de la Liga Venadense, improvisó un equipo y
aceptó la invitación teniendo en cuenta las buenas relaciones que
existìan con la institución de Carmen.
Justamente a Belgrano le tocó enfrentar al cuadro local en un
partido que se disputó el Viernes Santo en horas de la tarde. El
torneo culminaba el Domingo de Pascua.
Cabe aclarar que esos partidos se jugaban en dos períodos de treinta
minutos y en caso de empate en goles se computaban los tiros de esquina
ejecutados por cada bando, a fin de establecer el ganador. Si se
producía una igualdad en goles y corners, se recurría al azar: el
referí lanzaba una moneda al aire y el que acertaba el sorteo de
“cara o cruz”, resultaba el triunfador.
El encuentro entre Belgrano y Carmelense era muy parejo y estaba
empatado en goles y tiros de esquina, pero cuando faltaba un minuto para
terminar, un delantero del equipo local pateó al arco. El tiro salió
desviado y se fue afuera por la última línea. Pero ante el asombro de
todos el árbitro señaló con la mano tiro de esquina. Lógicamente los
hinchas de Belgrano y los jugadores reaccionaron de inmediato. Los
jugadores protestaban airadamente y rodearon al referí con el propósito
de que el juez reviera su grueso error. Comenzaron los gritos, las
corridas y los empujones. Los ánimos estaban caldeados y el ambiente
empezaba a tomar un cariz bastante peligroso.
De pronto, con paso firme, apareció en el campo de juego un señor opulento, con una fusta en la mano. ¡Era el comisario del pueblo! Con voz enérgica se dirigió a los jugadores azulgranas y les dijo: ¡Aquí hay que acatar a la autoridad! Si el referí dice que es corner, es porque fue corner…¡Así que señor árbitro, ordene que se tire el corner!…
Y el corner se ejecutó.
El partido terminó y Belgrano quedó eliminado.
El Comisario había triunfado.
De pronto, con paso firme, apareció en el campo de juego un señor opulento, con una fusta en la mano. ¡Era el comisario del pueblo! Con voz enérgica se dirigió a los jugadores azulgranas y les dijo: ¡Aquí hay que acatar a la autoridad! Si el referí dice que es corner, es porque fue corner…¡Así que señor árbitro, ordene que se tire el corner!…
Y el corner se ejecutó.
El partido terminó y Belgrano quedó eliminado.
El Comisario había triunfado.
Por Norberto Dall'Occhio
* *
* *
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus palabras siempre son bienvenidas. Gracias por comentar.