viernes, 17 de febrero de 2023

Jorge Alberto Tirelli


 Jorge Tirelli se destacó por su gran capacidad de trabajo, su sentido solidario, su accionar participativo y su amplia capacidad intelectual. Poseía un espíritu prolífico que lo hacía actuar en diversos ámbitos sociales, con un fuerte carácter hacedor y con una notable habilidad para resolver problemas.
  Nació el 17 de junio de 1946. Su infancia y adolescencia se desarrolló en Santa Isabel, recibiendo la educación en las escuelas Nº 179  y Nº 7 (E.E.S.O. Nº 214). Cursó sus estudios terciarios en la ciudad de Santa Fe, en la Facultad de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Litoral, graduándose como ingeniero químico. Mientras cursaba sus estudios obtuvo una beca de la empresa petrolera Esso destinada a los alumnos sobresalientes.
 Tras esto, junto a compañeros de la carrera y a su esposa Cristina Carri (con quién luego tuvo cuatro hijos), emprendió un intenso viaje por Europa que lo cautivó de sobremanera conociendo, en forma directa, el mundo industrial y cultural del viejo continente. A su regreso, en 1971, ocupó el cargo de jefe de sección hidrocarburos en la destilería de YPF de Ensenada (B. A.).
 En 1973 la firma Fernarolo S.A. compró y mejoró un antiguo establecimiento avícola de Santa Isabel (conocido como El Peladero) para la faena de cerdos. Al conocer que la firma necesitaba un ingeniero químico, Tirelli no dudó en postularse para el puesto de jefe de planta, siendo aceptado rápidamente. Así retornó, junto a su familia, a la localidad que lo vio nacer; esta vez no solo para desarrollar su profesión, si no también para dedicar gran parte de su tiempo a instituciones y emprendimientos de bien público y privado. Tuvo, en todo momento, como meta principal, mantener en buen funcionamiento al frigorífico y, aunque existieron ofrecimientos de mejoras laborales y económicas en otra localidad, resignó esos progresos personales para continuar en la empresa isabelense que le demandaba tiempo y esfuerzo.
 Poseedor de una oratoria vehemente y fluida, no dudaba en dirigirse a cualquier audiencia, por el tema que el momento lo requiriera, y exponer con claridad y convicción sus pensamientos y propuestas.
  Su actividad febril se trasladó, también, en diversos momentos de su vida, a otros planos locales. Al de la política, participando activamente en partidos vecinalistas; al económico y financiero, apoyando o integrando emprendimientos industriales o empresariales y siendo miembro activo de la Asociación Mutual del Club Belgrano; al de la cultura, siendo gestor e integrante de una empresa dedicada a la continuidad de la sala de cine; al de las instituciones sociales y deportivas, como la Sociedad Italiana en la que fue uno de los grandes motorizadores de la recuperación de su sala de cine y teatro, la Cooperativa de Agua Potable participando activamente en su creación y continuidad, la comisión para la instalación de teléfonos automáticos, la cooperadora de la Escuela Nº 214 o el Club Belgrano, donde integró repetidas veces la Comisión Directiva y varias subcomisiones siendo un fervoroso seguidor de equipos de fútbol de todas las categorías; al de la educación propiciando la creación de cursos de albañilería, plomería y electricidad; al de la organización de eventos colectivos como lo fue la fiesta del 75º Aniversario de Santa Isabel en la que fue su mayor gestor; o al de la religión, la católica, no solo siendo integrante de la comisión de la parroquia, si no también catequista y asistente del padre Trognot.
 Falleció el 3 de marzo de 1998, en su oficina del frigorífico, tras tomar la decisión de quitarse la vida. 

Fuente: Basado en una crónica de "Revista Pan"


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